TIÑAS

Tiñas

Los dermatofitos son un grupo de hongos que invaden la queratina la cual es una proteína que se encuentra en la piel, pelo y uñas. Estas infecciones son superficiales y se limitan a las capas de células muertasde la piel.

El nombre Tiña deriva del latín y quiere decir “larva”. Es el término médico para una micosis superficial. La clasificación de las tiñas se realiza dependiendo de la zona afectada:

Tiña capitis -micosis en piel cabelluda

Tiña corporis-micosis en el cuerpo

Tiña pedis- micosis en pies

Tiña cruris-micosis en ingles

Tiña unguíum u onicomicosis -micosis en uñas.

La tiña capitis es la más frecuente en los niños. En la mayoría de los casos la transmisión puede darse por el contagio con alguna mascota (perro o gato) afectada con hongos. Se observa como un área de alopecia (pérdida de cabello), generalmente única y de forma redondeada, con presencia de escama y cabellos cortados a diferente
nivel. En casos graves puede presentarse enrojecimiento y pus, (Querion de Celso), que es considerada una complicación de la tiña capitis, y es debida a la respuesta inflamatoria exagerada del paciente hacia el hongo, provocando una inflamación severa.

Las tiñas de cuerpo se contagian por contacto directo de persona a persona. Estas lesiones se observan como placas redondas con escama, en ocasiones con figuras geométricas, con bordes rojos elevados y un centro claro. La comezón es el síntoma principal. La tiña corporis es más frecuente en adolescentes y mujeres embarazadas, y la tiña cruris es más frecuente en varones.

La tiña pedis, también llamada pie de atleta, es la micosis superficial más frecuente en todo el mundo. Se afectan las plantas y los pliegues interdigitales. En casos graves puede haber fisuras y maceración e incluso ampollas. La tiña en manos es más rara y frecuentemente es seguida de una infección en los pies.

En la onicomicosis se observa una deformación y decoloración de la uña, así como un engrosamiento marcado. No todo lo que afecta a las uñas de los pies son hongos; existen múltiples patologías de la uña con características muy similares a una onicomicosis. El dermatólogo puede identificar las diferentes patologías y orientar al paciente sobre el tratamiento más adecuado.

El diagnóstico de las micosis superficiales es clínico. En algunos casos pueden hacerse un raspado leve de la piel o uñas para su examinación directa bajo microscopio y continuar el diagnóstico al observar las esporas. También se realizan cultivos de las lesiones para identificar las especies de hongos. La luz de Wood ayuda al diagnóstico ya que algunas especies de hongos producen una fluorescencia amarilla bajo luz UV. En raras ocasiones puede requerirse biopsia (muestra de piel).

Para el tratamiento de las micosis superficiales lo principal es llevar a cabo una buena higiene para evitar reinfecciones. Se deben mantener los pies secos, no andar descalzos y usar sandalias al bañarse. También hay que desinfectar los pisos de los baños con cloro por lo menos una vez a la semana. Para los atletas, es recomendable usar talcos que ayudan a absorber la humedad, ya que la humedad provee un ambiente favorable para el desarrollo de hongos.

En el caso de la infección por hongos se deben de evitar las cremas que contengan cortisona, por el riesgo de provocar una exacerbación de la infección. Se incluyen aquellas combinaciones comerciales con antimicóticos y cortisona.

Las infecciones leves en el cuerpo se pueden tratar con cremas aplicadas con antimicóticos. Las infecciones en piel cabelluda y uñas necesitan tratamiento oral que puede requerir por lo menos 3 meses. Se puede también acudir a modalidades de tratamiento como láser para mejorar el aspecto de las uñas, pero en la mayoría de los casos estos tratamientos van en conjunto con tratamiento oral.